martes, 1 de noviembre de 2016

La acera es mía. Soneto noviembre 2016


Suelo ir a casi todos los sitios caminando. Esto antes se consideraba saludable pero actualmente, en Pamplona, es una actividad de riesgo. Algunas bicicletas han tomado las aceras con la idea de echarnos a los peatones de ellas. Sus arremetidas contra los transeúntes recuerdan a las cargas de caballería. He intentado meterme en la cabeza de uno de estos «bicicleteros». Supongo que lo que piensan es lo que he escrito en el soneto titulado La acera es mía.