El pasado 8 de septiembre murió Camilo Sesto. Es un acontecimiento que me entristeció. De alguna manera, junto a él desaparece una parte de la banda sonora de mi niñez. Con el paso del tiempo el entorno en el he vivido se ha modificado: han cerrado cines y bares en los que fui más o menos feliz, han cambiado los nombres de algunas calles, playas que conocí vírgenes están urbanizadas, han aparecido barrios nuevos en la ciudad... El escenario cambia y con cada uno de esos cambios, como decía el gran Camilo, "algo de mí se va muriendo".
Este poema está incluido en el libro "Sonetos 2015-2024"
Creo que era un gran cantante y un gran compositor. Muy guapo. Lo tenía todo para ser feliz, pero igual no lo fue. Esto último no lo sé, pero siempre tuve la impresión de que debajo de la superficie las aguas eran tristes. Me dió mucha pena como lo trataron en sus años maduros. Creo que mucha gente y una gran parte de la prensa fue injusta con él.
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